Frente al espejo, él termina de anudarse la corbata y recoge su portafolio. Se dirige a la puerta acompañado por Isabel, se despiden con un beso y con las consabidas palabras "Te quiero y ten cuidado al conducir".
Lo observa partir, rauda entra en la casa, realiza el mismo ritual del último mes. Se arregla, coge su bolso y dirige sus pasos hacía la parada del autobús que la llevará hacía un nuevo punto de la ciudad.
Cariacontecida, triste y sin prestar atención a lo que le rodea. Va inmersa en sus pensamientos, ya no le queda tiempo, tampoco cree que su búsqueda dé el resultado que ella espera.
Todo un mes disimulando ante su marido, es la primera vez en toda una vida que le oculta algo, no se lo perdona y se reprocha no habérselo contado, ahora es tarde, todo ha sido culpa suya. No quiere que él sufra, lo ama más que a su vida, pero ha sido un error que no se perdonará jamás y lo tiene que solucionar.
Hoy tiene que continuar su búsqueda, tiene que encontrarlo como sea, mañana cumplen treinta años de casados y no puede fallarle de esa manera.
Ya ha recorrido casi toda la ciudad, los lugares más inverosímiles y raros, no ha sido posible encontrarlo, pero algo en su interior le dice, que hoy puede ser su gran día, que lo localizará.
Llora en silencio, no puede reprimir sus lágrimas, las personas con las que se cruza, la miran y sienten piedad, lo nota, no le da vergüenza que la vean de esa manera.
Lo que le interesa es hallarlo y si no lo encuentra, no tendrá el valor para presentarse delante de su marido y comunicárselo.
Sabe que él ya le habrá comprado el regalo de aniversario y ella tiene el suyo desde hace más de un mes bien guardado.
Hoy le toca un mercadillo de antigüedades, es su última oportunidad, le han dicho que quizás en ese lugar lo encuentre.
Va con toda la ilusión al lugar, está abarrotado de gente bulliciosa de todas partes. Mira y remira con detenimiento, se para, pregunta, nadie le da razón. La congoja le vence y rendida se sienta comenzando a llorar convulsivamente.
Una señora mayor la observa hace rato, Isabel entre las lágrimas la mira y esta le hace señas para que se acerque.
Cuando está a su altura, le dice: _Sé lo que buscas…Isabel se queda pasmada y confusa. _ ¡No te asustes mujer, no busques más, lo tengo yo! sabía que algún día vendrías a por él.
Isabel balbucea palabras inconexas, llora, ríe, y abraza a la mujer, ésta la separa de sí, cogiéndola de las manos y secándole las lágrimas, le dice: _A una mujer que como tú profesas tanto amor por su marido, al igual que él por ti, el destino no os puede castigar de esta forma.
La mujer mayor la invita a entrar a una tienda vieja, llena de polvo y telarañas. Deja a Isabel sola, se introduce en la trastienda, y al cabo de un rato sale, llevando consigo un paquete, lo abre. _ ¿Es lo que buscas con tanto ahínco?
No puede articular palabras, esta ahí, delante de sus ojos, lo coge, lo abraza, llora, ríe, salta, abraza a la mujer dándole cientos de besos, se arrodilla llorando. _ ¡Pídame usted lo que quiera!
_No quiero nada, lo que contiene el bolso me ha hecho recordar que yo, en los años que compartí con mi marido, teníamos algo similar y lo utilizábamos como vosotros.
-¿Como supo que era yo? _Fácil niña, por las fotos que contiene en su interior y por una de las cartas que me he permitido leer. Al no contener dirección, no he podido ponerme en contacto contigo, pero sabiendo la importancia de su contenido, sabía que habría sido un error lo de la pérdida y que algún día vendrías a buscarlo.
_Pero dime una cosa, ¿como pudiste perderlo?... _Es algo que no me perdonaré jamás, resulta que mi nuera se quedó encargada de nuestra casa mientras mi esposo y yo realizábamos un pequeño viaje. Quiso hacer limpieza general y darme una alegría. En el desván donde almaceno cosas antiguas y la mayoría cosas sin valor. Dentro de una caja tenía guardado el bolso, ella al ver que estaba pasado de moda y algo estropeado, se lo dio a un trapero junto a otras cosas.
Cual fue mi sorpresa al regresar y ver lo que había hecho, me quedé aturdida y no pude contárselo a mi marido, así que le pedí explicaciones a mi nuera de a quién se lo había entregado y desde entonces, he ido detrás de la pista, mañana es nuestro aniversario y este bolso es parte de nuestras vidas.
_Vete niña, cuida de tu marido y sed felices, yo ya estoy pagada con ver cómo esa mirada ya no es la misma que la que hace diez minutos.
Llegó el día e Isabel estaba feliz, había celebrado con la familia el treinta aniversario; se rieron, fotos, videos, pasteles, abrazos de los nietos, todo había salido muy bien, pero quedaba lo mejor para cuando se marcharan todos y quedaran a solas.
Ella se metió en el cuarto de baño, se preparó como cada noche, él la esperaba en la cama, Isabel salió con un bolso negro colgado al hombro, se puso a su lado, él le dio un beso, abrieron éste y él depositó un sobre en el interior de un bolsillo ex profeso para ello, Ella, hizo lo mismo, se dieron un beso de nuevo y lo cerraron.
Treinta años casados, treinta cartas de cada uno en su interior, una por año, solo las podrían abrir en el caso de que alguno de los dos faltara.
Fue una promesa que se hicieron cuando cumplieron el primer aniversario de boda, él se lo regaló y se prometieron introducir cada año una carta cada uno, para llenarlo del amor de los dos.
Lo que ocurrió después de apagar la luz, es algo que sólo Isabel y su marido saben.
Hay ciertos ritos que cada pareja hace para cuidar ese amor y manifestarlo como le place, que precioso escrito Fibo, grande tu alma amigo!
ResponderEliminarMuy tierno, el contenido del bolso
ResponderEliminarni me lo imaginaba.
Un beso
Me atrapo desde el principio!!!
ResponderEliminarMuy bueno, Fibo!!!!
Las parejas, sus ritos y mantener un amor que perdure con el paso del tiempo, muy dulce.
Cariños....
No me esperaba lo que ocultaba el bolso, y este escrito me ha gustado de forma especial,cuando se apaga la luz, solo quedan tres,"la Luna, ella y él", lo que ocurra es de su propiedad.Un beso, no se si decirte torero, con este lux que le has dado al bloc.Que tengas un buen comienzo de semana.Un abrazo.
ResponderEliminarEs una historia muy romántica, me encantó.
EliminarEs la primera vez que te leo y me has dejado fascinada.
Mil gracias por leerme, por tu apoyo y por tus comentarios.
Un gran abrazo,
Lucía
tierniiiisimo...qu bueno leer de vez en cuando cosas dulces..ya la vida de por si nos da la contra...mi cordiales saludos
ResponderEliminarabrir las cartas en caso de que uno se muera,
ResponderEliminara mi no me resultaría jajajaj
sin duda las abriría antes
buen relato FIBO y es que hay parejas que se inventan ritos y claves
para no contaminarse con la rutina que aplasta
abrazos y feliz inicio de semana
Para mantener la llama viva...hay que usar la imaginación...precioso relato...besoooosss
ResponderEliminarHola Fibo!!!! Todo lo que sea por cuidar el amor!!!! OLÉ OLÉ Y OLÉÉÉÉÉÉÉ. Besos desde Cáceres.
ResponderEliminarPD.Bien por esa foto de José Tomás.
Atrapada en cada una de tus sorprendentes historias , y que grande es el amor cuando es de verdad
ResponderEliminarUn besote amigo Fibo, buena semana!
Magnífico este relato, permanecí pendiente del objeto perdido, muy ágil hasta el final.
ResponderEliminarFelicitaciones.
Saludos.
¡Qué tierno!, cartas de amor cada aniversario, y cartas que sólo serán leídas cuando uno de ellos mueran...y acompañan cada aniversario de ilusión.
ResponderEliminar¡Viva el amor!, 1 beso.
¡Uy uy uy uy!! ¿Te has vuelto blandito? jejejejejeejejej.
ResponderEliminarBuen relato, algo remeloso, pero bueno, se te puede perdonar.
Besitos guardados en un bolso ¡Ni se te ocurra perderlos!
UUFFFFFFFF ME ENCANTÓ QUE HISTORIA TAN BONITA Y TAN TIERNA DE VERDAD UUFFFF YA ME GUSTARÍA A MI....... MUY BUENO Y BIEN LOGRADO BESOS DESDE MI BRILLO DEL MAR
ResponderEliminarAHHH SE ME OLVIDABA ME GUSTA TU NUEVO LOOK DEL BLOG UUFF ERES REAL MADRID ALÁ MADRID AJAJAAJAJ COMO DEBE SER
ResponderEliminarUn relato muy tierno, niño. Claro, el amor hay que cuidarlo cada día, pero es muy difícil luego en la práctica (hipotecas, suegras, familia, paro, rutina y bla bla bla).
ResponderEliminarPero este escrito tuyo es precioso, y me ha conmovido mucho.
un besazo.
Me gustó porque es real -Puede pasarte.-Un buen texto muchacho con suspenso de un final casi feliz-
ResponderEliminarUn gran realto en donde el amor es el protagonista y por ello su mensaje es muy noble. Un aplauso amigo.
ResponderEliminarUn bello relato de amor que germina con los años, verdadero. Detalles como esas cartas significan un símbolo para los dos, como echar miguitas de pan en el camino, como una botella con mensaje, como un collar de cuentas preciosas, año por año cada vez más valioso.
ResponderEliminarMe ha encantado, delicado y delicioso. Besito lunero contento amigo Fibo.
Preciosa historia
ResponderEliminarMe ha emocionado...
BESOS
Una historia muy bonita ,donde el compromiso de mantener la vela encendida de ser uno solo es lo principal ...
ResponderEliminarGracias por compartirlo ,la verdad me gusto muchisimo ...
Un besico.
Muy lindo tu escrito
ResponderEliminarYo me retiro del escribir. Mi meta se ha cumplido
Te agradezco las palabras y el diálogo que hacemos en otros blogs
Mis cariños sinceros
Por supuesto te seguiré leyendo
A través de tus palabras lo primero que se vivencia es tu modo de sentir y expresarte sobre el Amor. A través de el.. en forma peculiar y hermosa , lo vives con intensidad. Bellisima historia, dulce Fibo.
ResponderEliminarBesosssssss
Precioso relato amigo me encanto, que detalle más hermoso, suerte que yo no tenía que esperar un año para una carta, oh mensajes escritos, porque ahora no los tendría, me hiciste recordar las cartas que yo gurdo como el más preciado tesoro, es lo que más me ayudado al quedarme sin el, sus letras que al releerlas es como tenerlo presente, es lo mejor aparte de lo que uno siente por el otro dejarlo por escrito, creo que esto deberían hacerlo todas las parejas que se aman, porque siempre partirá uno antes que el otro.
ResponderEliminarUn gran abrazo amigo que tengas una hermosa semana gracias por tu hermoso escrito es muy bello y romántico.
Qué final tan sorprendente para un relato que me ha tenido pegada a la pantalla más que espectante.
ResponderEliminarLos rituales son comunes entre parejas pero éste se sale de la normalidad.
Uf! yo no sé si aguantaría hasta el final sin leer las cartas. Creo que no, la verdad, me podría más la curiosidad que la promesa.
Un cariñoso abrazo.
Pero que torero te has puestoooo jajaja
ResponderEliminarBueno, a mí me encantaría tener algo especial así... es una historia con magia aisshhh (suspiro)
Besos abisales
gracias por tu huella
ResponderEliminarfeliz semana
abrazoooo
Hola Fibo , este es el mejor relato que e leeido , (Bueno el que mas me gusta ) ya que todo lo que escribes me encanta , y gracias por nombrarme ya que mi nombre es el de la protagonista , lo malo es que yo no tengo marido de momento ¿ Tú crees , que yo tendre un marido , que me dure tantos años como ellos ? que felices se ven verdad , yo quiero algo igual para mi ,jajajajaja besitos de Lm.
ResponderEliminarpd; Que te a dao para poner una plaza de toros , en tu blog , la verdad es que me he llevado una gran sorpresa y un susto por el toro , por que parece que te valla a saltar de la pantalla ,jajajaja uff niño estoy algo loquita , besitos chao guapo .
Una historia muy hermosa tan sencilla y profunda como lo es el amor solo puedo decir que me ha fascinado te mando un beso y te me cuidas mucho
ResponderEliminarIntensa historia Fibo, una que se vive en éste mundo y que no es ni fábula ni teatro, una de tántas del mundo cotidiano y que seguro se habrán visto reconocidas muchas personas, un placer seguirte amigo, un abrazo.
ResponderEliminarUf y después de tomar todo este rato...no sabremos el final!!!!!!!!!!
ResponderEliminargr
Besos
mar
Qué precioso relato, Fibo... No sólo es tierno y romántico sino que has logrado mantener el suspense hasta el final y aun después dejas entrever que la acción continúa. Me ha encantado, gracias por compartirlo.
ResponderEliminarUn abrazo desde Asturias, que pases una semana de lo más grata.
muy bueno fibo, me tuviste hasta el final.
ResponderEliminarQue linda historia, que lindaaaaaa
ResponderEliminarSeguro que cuando se apagaron las luces entre los dos escribieron después de treinta años, la más hermosa carta de amor.
Besotes de siempre, guapo.
Fibo, me has hecho llorar amigo, y mucho, esta historia de amor me llega al alma, esta llena de amor y con un final feliz. De principio a fin me enganchaste. Cuidate mucho amigo.
ResponderEliminarHola Fibo , un relato muy hermoso la verdad es que me a gustado muchisimo , enhorabuena me quito el sombrero ante tí , besos y guiños de tu amiga Margarita*
ResponderEliminarmuy buena semana FIBO
ResponderEliminarabrazooooo
UNA HISTORIA QUE MUEVE FIBRAS.
ResponderEliminarAMIGO CON TODO RESPETO, NO ES MI INTENCIÓN HERIR SUS SENSIBILIDADES PERO, ABRÍ SU BLOG Y ESA IMAGEN DE ARRIBA ME CAUSA MUCHA TRISTEZA. REITERO MI APRECIO Y RESPETO HACIA USTED.
UN ABRAZO HERMANADO
¿tristeza? para mi es la alegria de alguien que ama lo que tiene ;su pais y esta orgulloso de eso.
EliminarCada uno percibe de los otros lo que tiene adentro
Para comer matamos animales
Eliminarsi bien no al toro
a la vaca
y casi todo lo que comemos
no son plantas.
Con mi respeto querido amigo
percibes diferente a los demas
Un saludo respetuoso para ti
¡Muy romántico Fibo, qué dulzura!. Me quedé soñando con algo así. Una buena forma de mantener los lazos, es crear e imaginar situaciones para sostener el amor, y el romanticismo tiene lo suyo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Interesante relato que nos lleva a imaginar que el ¨Para siempre¨ existe.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ha sido un agrado leer tan romántico relato de un amor que trasciende.
ResponderEliminarMe gusto mucho tu relato lleno de sensibilidad.
Muchos saludos.
Uff! He estado enganchada desde el principio con la búsqueda de Isabel. No me imaginaba qué era lo que podría buscar con tanta desesperación.
ResponderEliminarFibo, prefiero tus relatos de humor negro, con este me has hecho llorar. Has removido muchas cosas por dentro. MAGNÍFICO.
Un abrazo muy grande,
Eva.
Que historia tan preciosa, es una buena idea lo de las cartas, lo malo es cuando esas cartas estan llenas de reproches, que es lo mas avitual, ojalá siempre fuesen cartas con cosas bonitas.
ResponderEliminarMe ha gustado muchísimo Fibo, muchas gracias
Besos
Hola Fibo, pues una entrada que te engancha, tierna y dulce, pues que me ha encantado. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Fibo
ResponderEliminarUna preciosa historia de un gran amor, me emocionó. Besos
Muy tierna historia amigo y como siempre intrigadísima hasta el final.Besitos.
ResponderEliminarMuy buena entrada
ResponderEliminarHola Fibo, me has sorprendido muchísimo. A medida que iba leyendo me iba imaginando cosas, pero ¡nunca hubiese acertado¡.
ResponderEliminarEsta historia rezuma romanticismo. Me ha gustado mucho.
Ahhh... también me ha sorprendido ver fotos de mi Galicia. Espero que te haya gustado y que hayas sido muy feliz en mi tierra.
Un abrazo.
Madeira
fibo te mando el link de mi nuevo foro de poesía
ResponderEliminarwwwcuandoelsilencioeslafelicidad.blogspot.com
lawww va sin punto pues si nono lo encontrarás un beso!! y espero volver a verte en mi nueva casa que es casiigual a la otra!! besoss amigo!!
Un relato espectacular que me mantuvo con la intriga hasta alcanzar los últimos renglones. ¡Fascinante! Bravo, maestro! Un abrazo
ResponderEliminaramiguito disculpame mil veces ya lo solucioné mil perdones de corazón , besos
ResponderEliminarTe has planteado escribir un libro? O ya lo tienes? Siempre consigues engancharme a tus palabras.
ResponderEliminarUn saludo!!
Observo que tienes un club de fans muy amplio. También como consigues su atención hasta el final de los relatos muy bien rematados.
ResponderEliminarAl final por petición popular vas a tener que meterte con una novela.
:)
Buen fin de semana.
Abrazos.
Interesante, ameno y divertido relato.
ResponderEliminarBuen fin de semana.
Abrazos.
Pleno de amor y pasión
ResponderEliminarcomo todo lo que escribes...un besote
AMALIA
Saludos amigo, que pases un fabuloso fin de semana, cuidate mucho.
ResponderEliminarHola FIBO
ResponderEliminarMe encantó, vaya que cuando quieres ser romántico... lo eres.
Feliz fin de semana.
Un beso
Fibo, un placer volver a leer tus relatos. Te veo muy romanticón.
ResponderEliminarUn abrazo
Fico feliz em perceber que certas pessoas,
ResponderEliminarcomo nós, têm a capacidade de reconstruir para recomeçar.
Isso é sinal de garra e de luta, é saber viver, é tirar o
melhor de todos os passageiros.
Agradeço a Deus por você fazer parte da minha viagem,
e por mais que nossos assentos não estejam lado a lado,
com certeza,o vagão é o mesmo.
Com saudades desejo um feliz Domingo,
beijos na sua alma carinhosamente,Evanir.
A Viagem..
feliz comienzo de semana
ResponderEliminarabrazo grande FIbo
gracias por tu huella
Qué decirte de tu incomnensurable imaginación para hilar historias.
ResponderEliminarHe leído unos cuántos escritos, de arriba a abajo, sin pestañear, me quedo a comentar este, que es entrañable, tierno, sugerente y más acomodaticio a mis preferencias, sin desmerecer los otros.
Que estás en racha, no hay duda, que sabes cómo cuando y porqué, escribir, me consta y te felicito sinceramente.
La plantilla es curiosa, original y creo que sobre ella plasmarás muchas faenas con paseíllo y vuelta al ruedo, torero, jajaja.
Un abrazo en la distancia.