LA PICONERA

LA PICONERA

viernes, 5 de noviembre de 2010

UNA CITA DE CHAT


Este fin de semana pasado, he vivido una experiencia como nunca, de lo rara, placentera, divertida ¿y por qué no? ¡Muy sexual!

Todo comenzó un día aburrido, estaba en blanco, no sabía que escribir y para aclararme las idea, entre en el chat, uno que habitualmente frecuentaba hace tiempo para mayores de cuarenta y que por cierto dejé de hacerlo.

Entre con un nick cualquiera, estuve leyendo y ya comenzaba a aburrirme, pues era la misma tónica de cuando yo lo dejé, me fijé en un nick de mujer que me parecía muy desenfada, por lo que le hice un privado, pensando que quizás lo tuviera cerrado, pero no, estaba abierto, la saludé con mis maneras de siempre y ella me contestó, seguidamente sin hacer preguntas tipo test, comenzamos un dialogo irónico y divertido, ella se reía y yo también, así estuvimos cerca de dos horas, yo fui muy atrevido con ella y ella tampoco se cortaba, estábamos en nuestra salsa, coincidíamos.
Así que decidimos al final, darnos el msm y continuar a través de la cámara con la conversación, me quería conocer y yo a ella también.

Cuando nos conectamos a través de la cámara, me sorprendió lo guapa que era, yo a ella también le agradé físicamente, según me dijo.

A punto de terminar ya la charla, pues ya llevaba bastante tiempo y cansado, me propuso de vernos en su ciudad, yo no he sido nunca partidario de tener citas de estas, pero ni corto ni perezoso, le dije que sí, me preguntó que cuando nos podíamos ver, ella me dijo que si me parecía bien el mismo fin de semana, le dije que sí, ya que daba la casualidad de que no trabajaba esos días, concretamos el lugar y ella me dijo que se encargaba de todo.

Los siguientes días continuamos hablando a través de video llamada, hasta que llegó el momento de coger el coche y partir a su encuentro, a la aventura sin saber lo que me depararía, pero lo que si era seguro, que sexo si habría, ya que lo habíamos hablado..

Quiero hacer constar, que lo primero que nos prometimos fue que no preguntaríamos nada personal el uno del otro, y así fue.

Llegué a la ciudad un viernes al mediodía, directamente me fui al hotel donde ella había hecho la reserva, cuando llegué al hall del mismo, ahí ella, la reconocí al instante, nos abrazamos y nos besamos, yo la contemplé de arriba abajo y estaba muy bien, ella muy descarada hizo lo mismo, nos reímos, datos del viaje y me cogió de la mano y me llevó al ascensor para subir directamente a la habitación.

Una vez allí, no se cortó ni un pelo, rápidamente se desnudó, se metió en la bañera y me dijo que me metiera con ella, yo estaba estupefacto, me metí e hicimos el sexo como jamás ninguna mujer me lo ha hecho jamás, fue algo bárbaro, me mostró mil posturas dentro de ella.

Seguidamente y con una tranquilidad pasmosa, se vistió, me dijo que hiciera lo mismo y nos marchamos a comer a un restaurante donde previamente había hecho la reserva, todo lo tenía calculado, no me he reído más en la vida, era ocurrente, simpática, pizpireta, con una sonrisa siempre a flor de labios.

Ya terminada la comida, me mostró algunos rincones y monumentos típicos de la ciudad, ella siempre cogida de mi mano, nos hicimos fotos, pedimos que nos la hicieran y después de que nos tomamos un helado y como no estábamos lejos del hotel, volvimos al mismo, después de una ducha juntos, volvimos a practicar todo el sexo que quisimos, caímos rendidos.

Cuando anocheció nos fuimos a cenar, posteriormente disfrutamos de la noche, fuimos a un pub de moda y entre copa y copa hablábamos, nos contábamos, reíamos, para cuando nos dimos cuenta eran las cuatro de la mañana, hora de volver al hotel, donde volvimos a amarnos si cabe aún con más intensidad, ella no tenía límite ni ponía ningún impedimento a nada.

A la mañana siguiente, no sabría decir que hora era exactamente, me desperté sobresaltado, ¡cual mi sorpresa! mi amiga chatera estaba practicándome una felación estando yo dormido, me dijo que le gustaba despertar de esa manera a sus hombres, yo la dejé hacer y terminamos otra vez liados.

Yo necesitaba un descanso, ella era incansable, yo normalmente tampoco me echo para atrás, pero esta mujer me podía, serían sobre las doce de la mañana, nos volvimos a duchar, -que por limpio no quedara-.

Y nos fuimos de nuevo a visitar la ciudad y a comer, después me tenía reservada otra sorpresa, me bajo al aparcamiento del hotel, cogió su coche y me dijo que nos íbamos de turismo, me mostró los parajes más bellos de la zona, y en un lugar apartado me dijo que lo hiciéramos como en una escena de una peli que ella había visto y que quería hacerlo de pie y en una posición que es difícil explicar, todo salió de maravillas, ella era una mujer que vivía esos momentos con gritos ahogados como si la estuvieran martirizando, su ritmo era frenético, yo pensaba, “esta mujer acaba con agujetas o acaba conmigo”.

Volvimos a la ciudad sobre las siete de la tarde, nos duchamos y cambiamos de ropa, esta vez no buscó sexo, me llevó de tapeo y posteriormente a una función de teatro donde se celebraba una obra muy conocida, allí la vi emocionarse y hasta lloró desconsoladamente, me lo pasé muy bien.

Y para terminar la noche, me llevó a un promontorio muy conocido donde se divisa la ciudad, realmente unas vistas preciosas toda iluminada, nos abrazamos y nos besamos como dos enamorados, yo no deseaba que acabara nunca.

Pero todo acabó, volvimos al hotel, volvimos a amarnos, con mucha calma y tranquilidad, tomándonos todo el tiempo que quisimos, realmente disfrutamos, seguimos charlando, nos reímos y nos quedamos dormidos.

A la mañana siguiente, ya preparando todo para la vuelta, nos mirábamos y nos reíamos, era increíble como habíamos empatizado, miradas cómplices, caricias, nos fundimos en un largo beso, prometimos volver a vernos, estoy seguro de no se demorará mucho el reencuentro, ha sido un fin de semana de ensueño, lo hemos pasado realmente bien.

Todo perfecto, ¡trato cumplido! ella no me preguntó nada de mi vida, ni yo a ella tampoco.

Parece una historia más, pero no lo es, es pura realidad.

Un besote amiga del chat de cuarenta, he cumplido mi promesa he narrado sin dar datos

10 comentarios:

  1. Si es que esto de los chats es que te puede deparar sorpresas de lo más agradable... ;)

    Besos

    ResponderEliminar
  2. Interesante relato, seguro que mas de uno de los que entramos en un chat nos hemos visto identificados
    ¡Y porqué no! tambien es agradable vivir un gran amor diferente

    un beso Rossy

    ResponderEliminar
  3. quien eres?
    de donde eres?
    quien escribe esto?
    porque?
    subrrealista quizas ?
    pero bello

    ResponderEliminar
  4. ¿Quien soy? un hombre.
    ¿de donde soy?sevillano
    ¿Quien escribe esto? yo personalmente
    ¿Porqué? me gusta escribir de cualquier tema
    ¿subrrealista? puede ser.
    y gracias por lo de bello.
    Un abrazo,beso,saludo o lo que quieras anonimo/a

    ResponderEliminar
  5. PASMADA CREO Q ES POCO MIRA QUE YO SOY RECATADA LA TIPICA AMARGA QUE JAMAS LEE NADA DE ESTO POR QUE NO CREE EN EL AMOR Y MENOS EN ESTO PERO FUE RE DELICADA LA NARRACCION FUE TAN LINDA QUE ME RECORDE A CUANDO LEIA MIS FOTONOVELAS O MIS LIBRITOS Y SOÑABA CON EL PRINCIPE REALMENTE FUE GENIAL ..

    ResponderEliminar
  6. Vaya despues de un finde asi quien no empieza con una sonrisa la semana!
    Me gustó mucho tu texto.

    ResponderEliminar
  7. Llego a ti a traves de café poetas.
    Delicioso encuentro. Divinamente manera de vivirlo, con espontaneidad, con complicidad, con amor, con arrebato, con ternura, en compañía.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  8. Jajaaja me chifla leeerte Fibo :)
    que bonito fin de semana que pasarias :D

    ResponderEliminar
  9. ¡Buen relato, amigo Fibo...!
    "El azar me ha hecho, en esta ciudad desconocida, gozar de una mujer bella y ella conmigo, inmensamente...Y ahora, adiós, cuerpo, mujer, alma, vida..." Así narró un encuentro parecido al tuyo Juan Ramón Jiménez, hace unos setenta años. Saludos fraternos.

    ResponderEliminar